IDEAL
R.L. Granada 9 octubre 2014
El cantaor Arturo Fernández, con su manejo de los palos flamencos, hizo un recorrido por los estilos de este arte que por primera vez protagonizó un atardecer en el Carmen del Aljibe del Rey, en Concierto de Otoño de la Fundación Agua Granada. Fernández, que arrancó su intervención a capela y fue acompañado a la guitarra por Carlos Zárate, desplegó un ejemplo de "flamenco de etiqueta", como lo definió el flamencólogo Chema Cotarelo, presentador del acto.
Con una voz privilegiada - "como un rezo, un claustro que nos invita al recogimiento, un yunque en un fragua que otorga silencios", señaló Cotarelo-, el cantaor desató entusiasmos mientras interpretaba las soleares, tonás, siguiriyas, romances, tangos, fandangos o granaínas.
Voz de duende y poderío, que estremecía la tarde en su soledad esbelta. Fueron unas horas memorables que tuvieron prolongación albaicinera y en el goce y recuerdo de los que por allí andaban. Arturo Fernández y Carlos Zárate, dejaron también, su saber, y su alma en este rincón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario