Dentro del ciclo de Tertulias en el café Gijón de Madrid se celebró una Conferencia_Recital en homenaje y recuerdo a Pepín Bello, uno de los amigos más íntimos de Federico García Lorca en la madrileña Residencia de Estudiantes y, a su vez, buen mío durante la última década de su larga vida, ya que murió con 103 años.
El acto, organizado por la Asociación Cultural Conde de Aranda, incluyó una conferencia bajo el título del encabezamiento, y terminó con un recital de cante flamenco del cantaor Arturo Fernández, acompañado a la guitarra por Juan María Girela. Todo un éxito en el que se dieron cita personalidades y artistas del mundo de la cultura madrileña. Al final, el público asistente agradeció el actocon un largo y encendido aplauso, tanto al poeta conferenciante como al cantaor, que ofreció con pureza de estilo una exquisita muestra de "Jondura" y dominio de los palos flamencos.
Nuestro agradecimiento a todos por tan cálida acogida.
Francisco Vaquero Sánchez
Presidente As. C. Tertulias Lorquianas
Casa_Museo Federico Garcia Lorca
Valderrubio (Granada)
El cantaor granadino Arturo Fernández, da un recital en Café Gijón en homenaje a Pepin Bello con motivo de la celebración de su 109 cumpleaños de su nacimiento.
A veces, la vida te lleva por
unos caminos que tú nunca llegarías a pensar que fueses a recorrer.Esto
viene al caso, porque la primera vez que
conocí a “Curro Albaicín” fue en una
obradonde yo aprendía los oficios de
fontanero y calefactor, y él como
electricista.Tendría yo unos quince años y él que tuviera
dieciséis.No llegamos ateneramistad porque al ser empresas diferentes, simplemente nos saludábamos; así que
cuandole he comentado esto él no se
acordaba, pero yo sí porque además de
que tengo mucha fisonomía, como siempre estaba cantando llamaba más la
atención, y yo sin sabersiquiera de dónde
era, ni que venía de una familia que
cantaban y bailaban en las zambras, porque aunque en mi casa ya cantaba un
hermano mío y ademáscomo los
ángeles,a mí lo que me gustaba era el fútbol,
cosa que practicaba en el equipo de mi barrio "El Albaicín". Y, por qué no decirlo: no se me daba mal. Tenía
la ilusión de querer ser futbolista y en eso se quedó: en una ilusión. Ya con
veintidós añosdescubro el gusanillo del
cante y empiezo a tener conciencia del mundo del flamenco en Granada. Poco a
poco voy adentrándome en él, conociendo a los cantaores y tomando amistad con
muchos de ellos.
Pero vayamos con la figura de “Curro Albaicín”
que es la que quiero resaltar. Al principio
de conocerlo, en esta segunda etapa, solo
nos saludábamos al no llegar a entablar una amistad. Yo siempre le tuve cierta admiración, no sé
por qué, ya que él por así decirlo, no
canta por siguiriya o soleá que es lo
que a mí me gusta. En fin, creo que
seguramente sería por estas cosas que tienen algunos artistas en el arte de transmitir
que es una impronta que va por dentro y
muy poquitos la tienen. El es de los que
la tienen para llegar fácilmente a toda
la gente, les guste el flamenco o la
poesía. Para mí, es un artista como la copa de un pino, amén de un luchador nato por las cosas de su
barrio: El Sacromonte, de ahí mi doble
admiración, ya que gracias a él
va a quedar una reliquia de cantes que seguramente hubieran desaparecido del
mundo del flamenco granadino, además de darnos a conocer por su libro: “Zambras
de Granada y flamencos del Sacromonte”
una serie de datos y artistas que sin la labor que ha hecho nadie
recordaría. Por todo esto y porque amo a “Graná”, por tu
amistad y por sentirme amigo tuyo, te
doy las gracias.
Para plasmar la vida artística de “Curro Albaicín”
necesitaríamos escribir un libro, ya que su curriculum es verdaderamente
impresionante, así que me limitaré solo a
escribir algunos de los hechos más relevantes del artista.
Francisco Guardia Contreras, "Curro
Albaicín" nace en el barrio del Sacromonte
de Granada, un 22 de enero de 1948, en el seno de una familia cantaora
de la dinastía de los Cabreras. Empieza
desde muy joven a cantar en la zambra de Los Amayas. Durante un largo periodo alterna su vida
artística con los negocios llegando a tener su propio tablao en el Lavadero de
las Tablas, siendo el primero en tener
su cueva por donde pasan grandes
personalidades, tales como: los Reyes de España, Bill Clinton, Antonio
Gala y Pedro Almodóvar, entre otros. Ha actuado por medio mundo: Roma, Marruecos, Japón, Francia y, cómo no, ha recorrido con su arte casi toda España.
También trabajó para TVE y la TV japonesa;
en la Bienal de Sevilla presentó un espectáculo con las artistas mayores del
Sacromonte. Grabó varios discos y escribió
varios libros y no termina una cosa cuando ya está emprendiendo otra. Como digo, necesitaríamos un libro con muchas páginas para
plasmar toda una vida artística. Arturo Fernández.
El pasado sábado estuve acompañando a mi amigo Antonio Marín en el nombramiento que la Peña de la Plateria le hizo como socio de honor de dicha entidad, por su trayectoria como maestro artesano en la construcción de guitarras, tanto de corte clásico como de flamenco. Al acto asistieron familiares y amigos de Antonio, así como una buena parte de guitarreros granadinos, que querían estar con él en este día. Ya en 2007 también le fue otorgado el premio de las Bellas Artes por la Universidad de Granada. Hombre humilde y mejor persona, y es por esto por lo que quiero resaltar un poco su trayectoria guitarrera.
ANTONIO MARIN MONTERO, nace en Granada en enero de 1933, en la Plaza Puerta de Sol del granadino barrio del Realejo. Llega al mundo guitarrero sin antecedentes familiares y tras vencer muchas dificultades en su paso por diversos talleres de ebanistería, con muy corta edad lo encontramos en el obrador de Francisco Moya, donde no dura mucho tiempo ya que Recadero Veredas observó en el muy buenas cualidades para la gubia y se lo llevó consigo a su taller.
En el año 1957, ingresa en el taller del maestro Pérez y dos años más tarde, su padre le aconseja que se acerque a la Cuesta de Gomerez, al pie de la Alhambra, donde les espera Eduardo Ferrer, con el que comienza una estrecha relación y comienza su carrera como guitarrero.
En 1977, visita en Francia al maestro luthier Robert Bouchet, considerado uno de los más importantes de la historia, siendo sus instrumentos de los más valorados en las guitarras de colección. Ambos se hicieron excelentes amigos, trabajaron juntos en varias guitarras y Antonio, sigue desde entonces su escuela quedando como su único discípulo, usando su hacer, sus métodos, plantillas y sus tiempos.
Su amor por la perfección ha propiciado que jóvenes y menos jóvenes guitarreros, se acerquen a su taller para aprender del maestro los misterios y entre fijos de este noble oficio.
Antonio Marín, se ha convertido desde el comienzo de su carrera, como artesano de la guitarra en estandarte y embajador de Granada en los cinco continentes. Su decisión de cambiar en su juventud la ebanistería, en la que tenía una ganada reputación, por la lutheria, ha reportado en la ciudad de Granada uno de sus mayores exponentes a nivel mundial,
Reconocido internacionalmente como Maestro de la escuela granadina, mantiene un prestigio a nivel mundial. Antonio Marin, que no solo ha dejado su propia obra en manos de los guitarristas y concertistas más importantes y prestigiosos del mundo, si no que ha admitido discípulos en su taller, que hoy son los herederos de su arte y están considerados exponentes mundiales en su profesión.
Tal es la veneración intenacional por Antonio, que llegan continuamente guitarreros de todo el mundo a Granada, para establecerse cerca del maestro, junto a el en su taller artesanal de la Cuesta del Caidero en Granada, donde Antonio ejerce con maestría su cátedra del sonido, para poder estar junto a el y poder recibir los consejos del Maestro, consejos que por otro lado, nunca escatima en dar.
A sus 80 años, recién cumplidos, Antonio Marin Montero, prosigue día tras día, incansable, creando sonido que llenará el alma de los guitarristas que los produzcan en sus instrumentos por el resto de sus vidas y mayor placer de las personas y/o espectadores que tengan a bien acudir a sus conciertos.
Pocos artesanos han conseguido dejar tanto hecho en su vida y conseguir enaltecer el nombre de Granada, su ciudad, como ha hecho y hace Antonio Marin.
Como nace la idea del Concurso de Cante Jondo de Granada
Manuel de Falla amaba los amplios paseos por el Generalife, la visita a los cármenes de amigos. Uno de ésto, el de "Alonso Cano", situado en la ladera del Albaicín, era muy frecuentado por el compositor, ya que su dueño, Fernando Vílchez, había logrado captar la atención cariñosa del maestro.
Fernando Víchez, grueso ---con una anatomía zuloaguesca pero luminoso, en vez de terroso como Zuluaga, tenía una simpatía natural y espontánea, un lo que en la región se llama "ángel". Falla gustaba de conversar con él de cante jondo, del que Vílchez era especialista y poseía una apreciable discoteca con los cantos más puros del flamenco.
Formaba tertulia con el Miguel Cerón, joven con vocación por el arte, en bastantes facetas.
Lector de ensayos filosóficos y apasionado por la música, de la que era excelente conocedor, se complacía en practicar la pintura y la escultura, y en apreciar las joyas literarias en sus originales idiomas.
Falla gustaba de estas reuniones a las que se incorporó más tarde Federico García Lorca con sus veintidós años recién cumplidos, y en las que relucían temas sobre la raíz obscura y profundísima del arte andaluz.
Una tarde caminaban solitarios Manuel de Falla y Miguel Cerón por los jardines del Generalife, y volviendo a tema. Falla insistió en que el cante jondo estaba en trance de desaparecer, y Cerón insinuó que quizás se atajaría su muerte convocando un concurso de cantaores no profesionales, gente vieja que no estuviesen influida por las nuevas modas, creo sinceramente que aquí erraron los organizadores, pues el concurso se debería de haber organizado con profesionales. Respecto a las nuevas modas se referían a todos aquellos palos como son: milongas, colombianas, fandangos etc., que por aquella época les había dado por cantar a todos los cantaores. Pero volvamos al la conversación entre Falla y Cerón.
Entonces Cerón mirando a Falla le dice. ¿Se atreve usted a que hagamos ese concurso? ---preguntó.
Manuel de Falla se paró, miró atentamente a su compañero y sólo dijo:
---¡ Hombre, sí !. Y fue así como partió la ideal de dicho concurso.
CONCURSO NACIONAL DE CANTE JONDO GRANADA
Concurso 1922 Cincuentenario 1972
Año 1922, días 13 y 14 de Junio, lugar: Plaza de los Aljibes de la Alhambra. Año 1972, días 17 y 18 de Junio, lugar: Plaza de San Nicolás. (Albayzín).
1922 ORGANIZACIÓN: Centro Artístico. Presidente: Antonio Ortega Molina.
Secretario: José López Ruiz.
1972 ORGANIZACIÓN: Centro Artístico. Presidente: Miguel Olmedo Moreno.
Secretario: Rafael Díaz Cerón.
PATROCINIO:1922. Ayuntamiento. Alcalde: Germán García Gil de Gibaja
1972. Ayuntamiento. Alcalde. José Luis Pérez Sarrabona y Sanz
CARTEL del 22: Manuel Ángeles Ortiz.CARTEL DEL 72:Manuel Maldonado
ILUSTRACIONES:1922.Antonio López Sancho.1972.Rafael Vega de Pedro.
CONFERENCIAS: 1922,Federico García Lorca, Antonio Gallego Burín y textos de Manuel de Falla. Ilustraciones: Andrés Segovia y Manuel Jofré, a la guitarra.
CONFERENCIAS: 1972, Manuel Gallego Morell, Pedro Echevaría Bravo, Luis Rosales, Manuel Cano y Manuel López Rodríguez. Concierto: Agustín Castellón "Sabicas" Ilustracione: Diapositivas, discografía de Mairena, cante de Enrique Morente, y Manuel Gerena.
Lugar:1922, Centro Artístico y Hotel Alhambra Palace. 1972, Corral del Carbón, Centro Artístico y Aula de la Facultad de Farmacia.
CUANTÍA DE LOS PREMIOS: 1922 8.500 Pesetas, y 150.000 Pesetas, 1972
PUBLICACIONES:1922, El cante jondo (Canto primitivo andaluz). Editorial Urania, Granada.
Atribuido a Manuel de Falla.1972.Edición facsimil de el "El cante jondo". Postales de Miguel Ruiz Molina y recortables "Don Bartolo" Gráficas Muñoz. El cante jondo de Molina Fajardo, fascículo de la Obra Cultural de la Caja de Ahorros (Anel), y un disco con cantes de "El Tenazas" y número extra de (Calle de Elvira) Imprenta Alhambra.
EXPOSICIÓN: 1922, oleos de Ignacio Zuloaga en el Carmen de los Mártirez
1972, temas sobre la guitarra, cuadro de Eulalia Dolores de la Higuera.
Burín, Amalio Cuenca, Gregorio Abril y José López Ruiz (secretario). 1972,Pepe de la Matrona (presidente), Fosforito, Fernando Lastra, Manuel Soler, Manuel Salamanca, José Luque Navajas, Agustín Gómez, Manuel Zarzo "Perete", y Emilio Fuentes (secretario).
TEMAS DEL CONCURSO O CANTES: 1922.Grupo 1º: Seguiriyas y Martinetes. Grupo 2º: Carceleras, Caña, Polos y medios Polos. Grupo 3ª: Saetas, Soleares y Serranas.
1972.a) Tonás, Martinetes, Seguiriyas, ySerranas. b) Soleá, Polo o Caña, Tangos, Cantiñas y Bulerías. c) Malagueñas, Tarantas y Granaínas.
PRESENTADOR: 1922,Ramón Gómez de la Serna. 1972,Rafael Gómez Montero
LOS PREMIADOS: 1922,Diego Bermúdez "El Tenazas", Manolo Caracol, Francisco Gálvez "Yerbabuena", José Soler "Niño de Linares", "Niña Salinas", María Amaya la "Gazpacha", Concha Sierra y "La Goyita".
LOS PREMIADOS: 1972,Calixto Sánchez, Diego Clavel, Antonio Pérez "El Perro de Paterna", Manuel Ávila y Rafael "El Chaparro".
GUITARRAS: Ramón Montoya, José Cortés "Pepe el de la Flamenca", Niño de Huelva y José Cuéllar. 1922.
Juan y José Carmona "Los Habichuelas" y Manuel Martín Liñán. 1972
DIRECCIÓN COMISIÓN EJECUTIVA: 1922, Manuel de Falla. 1972,Sebastián Pérez
ASESORAMIENTO E INTERVENCIÓN: 1922, Pastora Pavón, Manuel Torre y Ramón Montoya. 1972, Peña Flamenca la Platería.
OTROS PRINCIPALES COLABORADORES: 1922, Zuloaga, Miguel Cerrón, Francisco Vergara , Manuel Jofré, Joaquín Turina, Eduardo Alcalde, Juan Ramón Jiménez, Oscar Plá, Ramón Pérez de Ayala, Fernando de los Ríos, Tomás Borrás, Ruiz de Almodóvar, Santiago Ruiseñol, José Mª. Rodríguez Acosta, Fernando Vílchez, Ángel Barrios y Fernández Almagro.
1972, Vicente González Barberán, Andrés Soria, Manuel Martín Liñán, Manuel Fernández Peña, Anastasio y José Manuel Rodríguez Acosta, Rafael Gómez Montero, Universidad de Granada, Excma. Diputación Provincial y Festival Internacional de Música y Danza de Granada. Arturo Fernández.
Tenazas de Morón El Niño Caracol
P.D. Pepe el de la Flamenca es tío abuelo de este que escribe
Este era el aspecto del alhambreño Patio de los Aljibes en Junio de 1922
En una sala abarrotada de gente, se celebró en Valderrubio el homenaje al periodista, escritor y poeta Rafael Gómez Montero organizado por las Tertulias Lorquianas en la Casa de Federico García Lorca.
En la foto: Ibáñez, Barragán, De las Heras, Salobreña y Vaquero, en el acto.
Por fin se hizo en Granada, con el duende y el misterio que estas cosas impelen, un homenaje a Rafael Gómez Montero. En su Granada. No pudo tener mayor acierto el notable cantaor Arturo Fernández cuando propuso a la Asociación Tertulias Lorquianas de Valderrubio, celebrar en la casa del poeta, el magno evento, dentro del marco de periodismo y flamenco.
Nadie faltó a la cita, convocada por Francisco Vaquero, ni siquiera la luna que, gozosa y rotunda, derramaba sobre el patio de la casa la gracia de los caireles lorquianos.
El acto se inició con una semblanza realizada por cinco personas que le conocieron muy bien.
Introdujo Esteban de las Heras, quien subrayó la faceta periodística de Gómez Montero, y le siguieron Eduardo Panadero Valiente, Juan Antonio Ibañez, Antonio Barragán Roda y el pintor y escritor, especialista lorquiano, José Salobreña. Intervenciones breves para resaltar la figurade Rafael Gómez Montero, definido allí como el "rey del Sacromonte", su amistad con María la Canastera, su trabajo como cronita del Barranco del Poqueira, su perfíl poético con las fiestas y lecturas en Almuñécar, (Fiesta de las Sirenas), Salobreña (Lucero del Alba), creador de Revista oral de poesía hispánica Hontiveros, etc. Rafael Gómez Montero, autor del conocido verso ('Entre Víznar y Alfacar/ mataron a un ruiseñor/ porque quería cantar...'), un verso que emocionó tanto a Antonio Barragán que se le quebró la garganta cuando lo recitaba.
En la mesa de tertulia se agolpaban los recuerdos de un hombre, Rafael,entregado por entero a cantar y a contar Granada. Las mejores voces y sonidos de la noche subían la intensidad de la emoción... Valderrubio, El Albaicín, Camino del Monte, hasta el alto arrabal de San Miguel de las estrellas. 'Miel y Canela', su perra, baila y ladra feliz su particular zambra gitana.
Pero el verdadero protagonista de la noche fue el cantaor Arturo Fernández, amigo de Gómez Montero y promotor del homenaje. Arturo Fernández, hondo y poderoso de voz, Rafael Hoces, certero y resuelto con la guitarra y Ana Gorbe, prodigiosa con el violín cubrieron con primores de encaje los cantares flamencos de la noche.
Cita de postín Agradeció el acto el hijo de Gómez Montero, Rafael Gómez Benito, también con alma de artista, acompañado de otros familiares y muchos amigos que llenaron a reventar el salón de actos de la casa de Federico. Gente de la cultura como Manuel Martín Lafuente, Purita Vaquero, Josefina Serrano, Brígida Coín, Charo Bonilla, María del Carmen Párrizas, María del Carmen García de la Vega, Ángeles Serrano, Pepe Leiva, Encarnita Fuentes, Antonio Almirón, Mateo Tejeda (presidente de la peña La Parra), acompañado de varios socios.
Fue un día de encuentros de muchos flamencos. Allí estaban Isidoro Pérez, concertista de guitarra y presidente de la federación granadina de peñas flamencas; Manuel Ruiz, presidente de la peña de Ogíjares; José Morillas, directivo de La Parra ; José Antonio Sánches Garrido, directivo de la peña de Illora, Rafael "El Taruguillo", una enciclopedia viviente del mundo flamenco.
Seguro que Rafael Gómez Montero hubiera disfrutado con tantos amigos en torno a Granada, Federico, la poesía y el mundo flamenco.
Arriba, agradeciendo el acto, Rafael Gómez Benito, Juan Antonio Ibáñez, Francisco Vaquero, Arturo Fernández, Rafael Hoces, Ana Gorbe y Federico.
De idz. a der. Manolo Cano, Andrés Segovia, Sabicas y nuestro homenajeado, Rafael Gómez Montero, nacido en Ávila el día 14 de Octubre de 1922, año en el que se celebró en Granada el famoso concurso de Cante Jondo. Quién diría que con el paso del tiempo él sería el presentador de la celebración del cincuentenarío de dicho Concurso.
Desde un tiempo a esta parte, se viene hablando mucho en el mundo del flamenco de lo puro y lo que no lo es, pero sobre todo de los flamencos que en cierta forma defendemos el llamémosle tradicional, a los cuales nos llaman puristas, a los que en cierta forma les gusta o hacen el llamado flamenco fusión.
Me ha costado tiempo y pensarlo bastante en decidirme a dar mi punto de vista sobre el tema, y puedo estar equivocado como tantas veces suelo hacerlo, pero es simplemente como digo mi punto de vista. La palabra purista la verdad es que me molesta un poco, no por el significado en sí de la palabra, pero si por la forma en que se quiere expresar, es decir, como si los que defendemos esta clase de flamenco tradicional ahora fuéramos unos bichos raros. Bajo mi punto de vista todo en esta vida tiene que evolucionar, porque si no todavía estaríamos en la edad de piedra, pero siempre dentro de unos parámetro; no todo debe de valer dentro del flamenco como se está haciendo para en cierta forma vivir y comer a costa de llamarle: flamenco, flamenquito, aflamencado, fusión, flamenco nuevo o como quieran llamar a tanta basura como se está haciendo, y que señores periodistas, presentadores y algunos escritores lo describan como flamenco, y los raros seamos los que defendemos si quieren llamarlo así, lo puro.
¿Qué pasaría si esto ocurriera con la música de Vivaldi, Bach, Stravinski, Mozart o Beethoven, por ejemplo, o con la ópera?, porque si en el flamenco es que todo vale, pues apaga y vámonos. Ya como sabemos la inmensa mayoría en 1922, una serie de señores entre los que se encontraban como ustedes saben Manuel de Falla, F. García Lorca, Joaquín Turina, Zuloaga, Miguel Cerón etc., organizaron el célebre concurso intentando que no llegase a más la adulteración que ya había emprendido en aquellos tiempos el flamenco, que creo no era ni una decima parte de lo que está ocurriendo ahora, ¿con qué motivo se crearon las peñas? Pues precisamente para difundir y velar por esa tradición o pureza como quieran llamarle del cante. Y los famosos concursos, ¿para qué nacieron? ¿en cuántos se han eliminado a los cantaores por no hacer los cantes puros, según los señores del jurado? Por cierto y sigue pasando, más de la mitad de estos señores que están en los jurados no entienden de flamenco; se creen que con distinguír lo que es una soleá o una seguiriya, eso es saber, pero vamos esto es otro tema que quizás otro día toque.
Ahora pregunto: cuando visitamos una ciudad ¿Qué es lo que vamos a ver? Sus edificios nuevos tan altos y horrorosos la mayoría, o los cascos antiguos y sus museos. Con esto no quiero hacer una apología a ultranza ni un conservadurismo radical. Volviendo al flamenco a su hermetismo o a las cuevas como algunos dicen que estaba, cosa que creo no ha sido así del todo, pues como nos describe Cervantes a Preciosa, ya cantaba y bailaba en algunas fiestas, o el mismo Estébanez Calderón en sus Escenas Andaluzas también nos habla de una fiesta en la que se encontraban el Fillo, Juan de Dios, la Perla, el Planeta y algunos más. De acuerdo que luego con la llegada de los cafés cantantes terminó de abrirse al gran público, pero no estaba tan enclaustrado como nos quieren hacer creer, de todas las maneras pienso sinceramente que al flamenco pueden llegar otros instrumentos que lo enriquezcan, pero que si se canta por seguiriyas suene a seguiriyas, independiente de la música que quieras meterle, pero conservando su base, ¿o acaso pegar gritos con una banda de rock es hacer flamenco?, por poner un ejemplo, que podríamos poner muchos. Sinceramente creo que si el flamenco ha llegado aquí a nuestros días conservando toda su esencia es debido en parte a esos cantaores y aficionados que han antepuesto su arte a favor del flamenco y no al revés, es decir, el flamenco en favor de ellos. Lo siento por los que no les pueda gustar este comentario, pero yo me aficioné a este arte escuchando a D. Antonio Chacón, Manuel Torre, Juanito Mojama, Tomas y Pastora Pavón, Cojo de Málaga, Juan Talegas, Antonio Mairena, Juan Varea, el Gallinas, Terremoto, Fernanda de Utrera, Vallejo, es decir, flamenco tradicional o puro, me da igual el nombre.
Arturo Fernández
El cantaor Antonio Fernández Díaz, "Fosforito", en una entrevista para Efe. dice: el flamenco es un "arte caliente que afecta a todos en mayor o menor medida", por el que pide respeto, ya que se asombra cuando ve carteles que se aprovechan de la buena que tiene esta música y anuncian como "flamenkito con `k´ cualquier giro que suene a aflamencado".
"Cuando en la taberna del Pinto escuché una noche a Talega, Pastora, Tomás Torre y Antonio Mairena, comprendí que esa era la verdad del cante y el camino a seguir".