28/10/18

LA GRANADA CANTAORA

       

          Esta publicación que tienen a su vista, me ofrece la oportunidad de exponer y ofrecer mi opinión sobre nuestro Arte Flamenco. Y, más concretamente, en su relación con Granada. O sea, de los cantaores que ha dado nuestra tierra. Porque como digo en otra entrada de mi blog, siempre, o casi siempre, se ha especulado desde el resto de Andalucía, de la Granada cantaora, llegándose a decir que Granada es tierra de guitarristas, bailaores-as, pero nunca de cantaores-as. Esto incluso lo llegué a oír hace años en el programa televisivo de Canal Sur "La Puerta del Cante", a preguntas del presentador Manuel Curao, con objeto de ser llamados para dicho programa los cantaores granadinos, a un aficionado conocedor y peñista, que así lo certificó.

               Por mi parte debo decir que estas cosas duelen; pero más cuando vienen de un granadino que se las da de muy entendido, y además alardea de ello. Con su repuesta lo que hizo fue hacerle un daño grandísimo a todos los cantaores que por aquellos entonces habitábamos con ilusión y entrega los artísticos de la ciudad y provincia. Aquel programa pudo haber sido una rampa de lanzamiento para algunos, pero mientras que por allí pasaron todos los artistas de Andalucía, nosotros nos tuvimos que conformar con verlos por la tele.



          En una entrevista que le hacen en el diario Ideal a Antonio Cuevas "El Piki", se queja con amargura: "... no veo luz, ni puertas abiertas por ningún sitio, al contrario, me las están cerrando, no sé por qué, pero necesito vivir y comer, y para hacerlo tengo que  ausentarme de mi tierra..."

Antonio Cuevas "El Piki"

       
         Aquí se ha llegado a criticar al mismísimo Enrique Morente, más que en cualquier sitio. Y cierto es que hemos tenido dos problemas: los sabelotodo y el deporte nacional que es la envidia, y que en nuestra tierra está bastante acentuada; basta con decir que el primero en criticar a un cantaor es su propio compañero.

        El desconocimiento que se tiene de este arte tan grande por parte de la gente que lo maneja  -llámense Instituciones, Peñas, Entidades culturales y un amplio abanico de gestores-, y que siempre se han dejado llevar, o casi siempre, por la mediocridad. Lamentablemente se ha valorado más lo negativo de fuera que lo bueno de dentro. ¡Ah! Y sigue siendo así. Pero vamos a ver si desmontamos ya de una vez este maleficio que tenemos y demostramos  que Granada sí es cantaora.

          Escribe Eduardo Molina Fajardo, en la taberna del "Faquillas" en el Campo del Príncipe con su riquísima colección de 300 discos antiguos de flamenco donde se recogen las más puras y valiosas voces desaparecidas y podemos evocar a toda una generación de cantaores granadinos que ofrecieron la flor de su cante desde el año 1925 en adelante.

          Estos cantaores a los que se refiere Molina Fajardo, aparecieron en el último tercio del siglo XIX: Antonio el Calabacino, Antonio Camacho,  Antonio Marquez, Antonio el Tejeringuero, Frasquito Yerbabuena, Manuel Rosales, Miguel Milena, Nicolar el Tuerto, Paco el del Gas, El Risa, Juanillo el Gitano, Lola Maya, etc. Sin olvidarnos de Tío José el Granadino ni de África la Pezeña. Luego vendrían ya en el siglo XX, Antonio Cuevas "El Piki", Antonio Fernández Maldonado, Carmelilla del Monte, Carmen Salinas, Curro Vega, Enrique Morente, Guzmán Alvea, José Carmona "Chocolate de Granada", Javier Montenegro, La Gazpacha, Manuel Ávila, Manuel Rodríguez "El Ruso", Miguel López "El Saeta", Miguel Mariscal, Pepe Albaicín, Ramón de Loja, Victorino de Pinos, Nene de Santa Fé... Estos son algunos nombres de los que podríamos poner, ya que como se suele decir, hemos dejado en el tintero gran parte de los nacidos a mediado del siglo XX y último tercio que son los nuevos brotes de lo que tenemos en estos momentos, como son: Pedro el Granaíno, David de Jacoba, Antonio Campos, Ana Mochón, Estrella Morente,  Marina Heredia etc.

          Esperemos que algún día el flamenco esté en manos de personas que de verdad sepan de lo que va, sin intereses ni partidismos, y así poder estar en el lugar que nos pertenece por derecho.

Arturo Fernández.

                                                                         
                                                                             
          

15/10/18

EL CANTE POR GRANADINAS

         
       La entrada que hoy hago para hablar sobre el cante por Granadinas, se debe a unos comentarios que suscitaron en mi persona, un cante de Manuel Vega "El Carbonerillo", en un artículo escrito por el gran aficionado y conocedor de este arte como lo es, mi amigo D. Andrés Raya, con fecha de 11 de octubre de 2018 en su blog: Flamenco en mi memoria, bajo el titulo "Flamenco en pequeñas dosis ( I ): Media Granadina".

          Desde que me adentré en el mundo del flamenco, allá por el año 1972, quiero recordar, ya que para las fechas soy un poco despistado, que no he dejado de oír incoherencias, y que algunas veces yo también las diré. Bajo mi punto de vista, que quizá esté equivocado, voy a dar mi parecer sobre lo que personalmente pienso del cante por Granadinas, desde que D. Antonio Chacón creara esta forma de cantar por dicho cante, ya que como todos sabemos existía este cante como especificó en 1845 Estébanez Calderón, y dos años antes el semanario local "El Pasatiempos".
          
          Empezaré diciendo que si en este cante, como ocurre por ejemplo en la Malagueña, no hay más diversidad de estilos, es simplemente porque los sabios de turno, nunca lo ha permitido en Granada. Todo lo que no sea cantar por Granadinas al estilo de Chacón, o Vallejo, ya para ellos era que estaba mal cantada. Recuerdo que en los concursos, si cantabas por Granadinas al estilo de Vallejo, que no la de su creador, ya tenías medio concurso ganado, simplemente con tener una capacidad pulmonar buena, y al final aguantaras el ¡ay!, cuanto más mejor. Con esto ya estaba todo solucionado, como si el alejar fuera la esencia del cante. Esto sigue sucediendo, siempre que la salida, y esa es otra, sea Triaa..., como digas Yaya..., aunque le des la tonalidad de la Granadina, para los sabios no está bien. Creo recordar que Chacón siempre salía con Yaya..., así que si él fue su creador, que me lo expliquen.

          
          Cosa distinta, que nunca he entendido, es la controversia que siempre ha existido a raíz de que Manuel Vallejo grabara el cante por Granadinas. Como todos ustedes saben y no sabemos a qué fue debido, en la carátulas de los discos de Vallejo sale impresionado el cante al que Antonio Chacón, su creador, y esto lo recalco, porque este es el quid de la cuestión, llamó Granadina, y Manuel Vallejo, le llama media Granadina y viceversa; cosa que ya no podremos saber si fue error de impresión o no. Pero como digo, no entiendo la incoherencia de discutir este tema tantísimo tiempo: que si Vallejo, que si Chacón. Miren ustedes, señores: cuando una persona crea una cosa y le pone nombre y apellidos, ya no hay nada más de qué hablar. ¿Queda claro?, amén de que media cosa no puede ser más que una entera.
      Todo esto viene como digo al principio, porque en la entrada que hace mi amigo Andrés Raya, leo que tienen que llamarse y, esta es otra ocurrencia de algún sabio, grande, o chica, es por lo que he querido dar mi opinión. Fíjense ustedes en: "Engarza en oro y Marfil" Media Granadina, y "La Virgen de las Angustias" Granadina.

          La verdad es que tengo que confesar que a mí personalmente no me gusta lo de media ni entera. 

         Me gusta más la palabra Granadinas, como pasa con las Malagueñas. Si los sabios de turno de verdad, sienten tanto el cante de Granada, lo que deberían hacer es promover que hay cantaores que le dan otro airecillo, y eso es enriquecer el cante. 

       Por qué no podríamos tener por ejemplo: Granadinas de Chacón, Vallejo, Cepero, Tomas, Morente, etc. Y no encerrarnos solamente en Chacón Y Vallejo.

Las fotografías de las caratulas, son de Carlos Martín Ballester.

Arturo Fernández.